domingo, 23 de junio de 2013

El pequeño Juan nació una noche de San Juan.
Bajo la higuera lloró, luego de que su madre se ahorcó.
Nadie sabe por que su madre lo decidió,
Sólo sabían que su padre de un barranco cayó.

De rojo el bebe vestía,
Y brillantes sus mejillas más rojas lucían.
Una vieja de casa cercana oía llorar
A la cría que no paraba de gritar.

Las vacas y caballos mucha atención ponían
A ese esperpento que nervioso los ponían.
Arañas, gusanos y baratas,
Parecieron subir entre sus patas.

Nadie creía lo mala madre que el bebe tenía,
Lo había dejado tal cual había nacido
Sin ropa y con sangre esparcida
Por el rostro que rojo tenía.

Cuando las doce y quince el reloj mostraba,
Su padre ya la roja capa se montaba.
El que hace un tiempo al barranco había caído
No sólo la vida se le había ido.

Entre azufre apareció sin mirar quien los veía
Apareció triunfante como siempre,
Ya no como la serpiente, más bien,
Cuernos, bigote y cola, adornaban el rojo que vestía.

Al bebe tomó por la cabeza sin pensar si se caía,
Tirando de sus patas por si algo salía.
Esperando al menos un poco de mierda
No fue nada haciendo una escena más cerda.

De su lengua algo sacó
Como humo hubiera dicho la vieja
Que cerca en su casa se acostó,
Y nunca vio como el bebe se durmió.

Durmió como dije el bebe
Sin que nadie se percatara,
De cómo su llanto cesó

De ese sueño del cual nunca despertó.

jueves, 9 de mayo de 2013

Que horrible es cuando empiezas a sentir cosas por alguien por el cual no deberías sentir cosas. No lo digo en este momento por alguien que a lo mejor no tiene el mismo genero (entiéndase genero y no sexo) si no por el hecho de que tus ideales son contrarios. No es por el hecho de que tu mente diga 'NO!' si no que el ambiente en el cual te desenvuelves por los mismos te presionan o te condicionan a ese tipo de cosas.
A lo que voy, es que si un comunista está enamorado de un neoliberal (aunque no es este el caso) no sufrirá el neoliberal, si no el comunista. Pero no sufrirá por que su mente lo condicione. Si no por que quienes lo condicionan son los otros comunistas. No es que dicha regla esté escrita, está en la moral de la 'inconsciencia' colectiva. Pero es incluso peor, cuando la otra persona tiene ese 'inconsciente' colectivo. 
Seguramente la única forma de que ahí algo pase, es que se dejen las cosas sobre la meza, y se deje claro todo desde un principio para evitar algún conflicto entre ambos.

domingo, 3 de marzo de 2013

¿Por qué no podemos seguir siendo unos simples niños incapaces de enamorarse? ¿Alguien se ha dado cuenta lo estúpido que es? Por qué tenemos que sentir una atracción irracional hacia alguien, que en el caso de que no nos corresponda, no sólo nos sentimos como una real caca, si no que cuando llegamos a ver a esa persona nuestro cuerpo reacciona de la peor forma y nos mete en un aprieto. Somos unos seres tan estúpidos que hasta dependemos de eso, dependemos del sentimiento de una persona que en algunos casos, ni si quiera sabe que existimos, y si lo sabe y nos tiene en cuenta... pasamos a importar tanto como el papel con el cual nos limpiamos el ano.

sábado, 22 de septiembre de 2012

Sería excelente que las historias que leo...o la que contaban nuestros ancestros, esas llenas de magia...fueran real.
Esas historias donde tu destino está escrito, y sabes donde se dirige. Y no importa que tan mal se vean las cosas, siempre puedes llegar al final feliz.
Eso nos facilitaría mucho las cosas, partiendo por el hecho que ahorraría todos esos dolores de estómago esporádicos...cuando vemos que todo está negro y no sabemos como huir de nuestros destinos.
Hay veces en que somos incapaces de 'recordar como encender la luz'.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Que miedo...que miedo de verdad que pasemos de ser los mejores amigos de la vida....a ser personas que en la calle se limitan a las miradas, y sólo a ellas.
Que miedo no poder volver a disfrutar un cigarrillo juntos, escuchando una canción vitalisante, para luego imaginar como seríamos en 40 años más.
Sólo quiero que se me pase luego :)
yo sé que podré...si no... parame tú....

lunes, 27 de agosto de 2012

Cuantas veces no desee que apareciera alguien así..pero ahora? justo cuando estoy en el peor momento. Justo cuando quise nuevamente emprender este 'viaje astral', del cual no se retorna. Es cómo aquel ángel, o aquel mareador camino.
Es lo peor juntar estas tres cosas. Tu bajo rendimiento por exceso de problemas, tu odio al mundo, y en especial el odio a tu cuerpo. Esas ganas de olvidar todo, de quedar en la nada de tu mente, las que te llevan a la perdición máxima.
¿Cómo me siento? Como el peor engendro del mundo. ¿Porqué? porque es cuando se separa mi corazón de mi mente, pero no por una idea sobre un sentimiento, si no cuando tu mente quiere esta con alguien, por que es quien buscabas y tienes miedo a que no aparezca otra persona así, mientras tu corazón late fuertemente por otra persona, pero no olvida a la que ya está ahí.
¿Raro, no? pero es una tortura que silenciosamente te mata...como si te destruyeran el cuerpo de a poco, como lo estoy haciendo ahora mismo.
Me siento realmente como Cherubino... ese niño. Si, creo que sigo siendo un niño, y seguramente lo seré por mucho tiempo. ¿Cómo crecer? yo también quiero la receta. Pero no se si es porque el tiempo de embarcarme a llegado sin preparación alguna, o porque trato de correr sobre la linea del tiempo.
Ahora, sinceramente, se nada.

martes, 17 de julio de 2012

Cosas del destino

Me aterra. Me aterra si quiera pensar en que eso podría pasar. ¿Por qué? No lo sé. Puede ser por el hecho de que el tiempo y el destino están confabulando en mi contra. El gran Cronos quiere que caiga en su hechizo, o seguramente es Eros.
¿Por qué, Eros, me lanzas este destino, tan impenetrable por aquella pequeña alma aventurera? ¿No debería ser un juego parejo, y poder los dos luchar con las mismas armas? ¿O es acaso una prueba de Hades, y demostrar que puedo ocuparlas sin necesidad de un buen argumento? ¿O es simplemente Eros quien quiera jugar, y dejar que las cosas pasen?
No lo sé, nada sé, sólo sé que podría caer en el abismo de las cartas y perderme por siempre en las impenetrables sombras del inframundo.